¿Cómo reivindicar el cuerpo como territorio a través del biodrama? Este fue uno de los cuestionamientos que dio lugar al taller de Biodrama Teatral dirigido por la docente Gina Ávila, en el marco de la beca «Territorios Activos» del PDE 2023. Las historias de vida de los participantes fueron el punto de partida para la construcción de estas cápsulas teatrales, que acercan lo íntimo a la creación teatral.
DESCUBRIENDO LA TEATRALIDAD: EXPLORACIÓN POÉTICA EN LOS BIODRAMAS
¿Cómo descubrir la «teatralidad» en nuestra propia historia de vida? Esta pregunta se convirtió en el hilo conductor para construcción poética de los biodramas. A través de este cuestionamiento, y vinculando el concepto de cuerpo como territorio primario, se exploró la relación que cada participante ha establecido con su propio cuerpo. Esta exploración abrió espacios de reflexión en torno a temas complejos como las relaciones familiares, la identidad sexual, los procesos de resiliencia, las heridas de la infancia, el amor propio, el mundo emocional, la salud mental, entre otros.
Después de investigar las historias de vida de los participantes, los objetos personales comenzaron a ganar protagonismo, generando la pregunta sobre la importancia de los vínculos y cómo los recuerdos pueden convertirse en material sensible para la construcción de las escenas. Los objetos seleccionados por los participantes capturaban la esencia de los fragmentos de vida que se iban a escenificar, asegurándose de que estos relatos autobiográficos tuvieran un elemento de «teatralidad», o lo que Vivi Tellas, creadora de esta técnica, llama «UMF» (Unidad Mínima de Ficción).
Hasta este momento, el proceso de creación de los biodramas estuvo cargado de mucha catarsis, ya que todo el material sensible para la construcción dramática se centró en conocer a los participantes, quienes luego serían intérpretes de sus propias vidas. Emociones, historias, procesos, traumas, anhelos, pensamientos, revelaciones, secretos y, sobre todo, complicidad, se vivieron en estos encuentros que, a pesar de la virtualidad, fueron un espacio de conexión, confianza y respeto colectivo.
EXPERIMENTACIÓN: UN VIAJE BIODRAMÁTICO A TRAVÉS DEL TIEMPO Y LOS SENTIDOS
En el camino hacia la creación del biodrama, nos sumergimos en un esquema autobiográfico que abordara las tres etapas fundamentales de la vida de los participantes: infancia, adolescencia y adultez. Esta exploración se basó en la relación de objetos con momentos significativos que funcionaran como ventanas hacia el pasado. Fotografías, objetos y recuerdos sensoriales complementaron estas narraciones, evolucionando gradualmente hacia un formato audiovisual. Cabe resaltar que este proceso se llevó a cabo en el ámbito virtual, siendo este medio visual el más cercano a la experiencia teatral.
Es vital subrayar que el trabajo biodramático implica la posibilidad de desnudar el mundo íntimo de los intérpretes. Requiere una delicadeza especial en lo que se cuenta, lo que se desea narrar y la importancia que tiene para el participante decidir si estas historias deben abrirse al ámbito público. En el proceso de experimentación en este campo, la reflexión sobre lo que somos y cómo el teatro se convierte en un reflejo de nuestras realidades puede volverse sumamente compleja.
Redescubrir el cuerpo como un territorio colonizado por la cultura y que, de alguna manera, debemos reapropiarnos, fue uno de los aspectos más destacados en esta fase creativa. A menudo, tendemos a pensar que el territorio es externo y olvidamos ese primer espacio que habitamos: nosotros mismos. Desde esa perspectiva, los relatos que presentamos aquí sintetizan las perspectivas individuales de cada participante, presentando sus voces y su visión del mundo a través de la escenificación de sus experiencias de vida.
Los trabajos presentados a continuación sirven como punto de partida para lo que podría constituirse como un biodrama. Es fundamental tener en cuenta que el trabajo presencial es esencial en este tipo de creaciones, y a partir de lo presentado, se abren caminos para la realización de una serie de piezas cortas o monólogos con cada uno de los participantes. No se lo pierdan.
Daniela Carmona
Una experiencia maravillosa en este taller de Biodrama, Gracias por brindar el conocimiento, realmente da perspectivas diferentes en nuestra carrera como artistas, como seres humanos. muchas gracias!
Daniela Ángel Madrid
Fue una experiencia extraordinaria ser parte del proyecto Biodramas con Arte en Boga. Nunca sentí tanta conexión de mi cuerpo con el territorio. Pasos, cantos, danzas y memorias, todos estos elementos reunidos en la recreación. 🙂 La ciudad debe continuar con estos espacios de apropiación.
María C. Castaño
Me encantó este Taller. Fue un proceso que permitió enriquecer mi autoconocimiento, recordar momentos recónditos en la memoria. Profundizar.Aprender del otro,conocerlo.
Gracias por este espacio, Gracias por la inclusión desde la virtualidad, por permitir estar, siendo de otra ciudad.
Me sentí muy feliz y fue una valiosa experiencia.